El nacimiento de los Estados Unidos de América y la aportación de España a su independencia

• Author: Ignacio Ruiz Rodríguez
• Pages: 63-78

CAPÍTULO II

EL NACIMIENTO D

E LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA

Y LA APORTACIÓN DE ESPAÑA A SU INDEPENDENCIA

Introducción

Cuando apenas comenzaban a transcurrir los primeros años del siglo

XVII, en 1607, un grupo de personas originarias de tierras suecas, habían

erigido una diminuta aldea en lo que más tarde sería conocido como James-

town88 (Virginia). Eran portadores de una cédula del Rey Jacobo I de In-

glaterra89, en virtud de la cual fundaron la primera colonia siete meses des-

pués de su arribo a tierras americanas. Además, como consecuencia de su

emprendimiento, la colonia con el tiempo creció y prosperó, encontrando

como empresa que les garantizara el sustento en el cultivo del tabaco, pro-

ducto que no tardarían en vender en la propia Inglaterra, a partir de 1614.

Igualmente, en Nueva Inglaterra, región nororiental de lo que hoy son los

Estados Unidos, los puritanos británicos se encargaron de establecer varias colo-

nias. Éstos, en su forma de ver la religión que profesaban, entendían que la Igle-

sia inglesa había adoptado demasiadas prácticas propias del catolicismo, motivo

por el cual habían llegado a tierras norteamericanas huyendo de la persecución

que vivían de primera mano en tierras británicas y con la intención de fundar

una colonia basada en sus propios ideales religiosos. Un grupo de estos purita-

nos ingleses, conocidos como los peregrinos, cruzaron el Atlántico en un navío

88 En este sentido, fueron los navíos Susan Constant, Godspeed y Discovery los que llevando

a bordo a 104 hombres, llegaron a la citada zona el 14 de mayo de 1607. Éstos, en menos de un mes

edificaron el fuerte de Jamestown, quedando emplazada su ubicación en una pequeña península, pro-

tegiendo su forma triangular a los colonos de las previsibles amenazas de otros barcos y ataques españo-

les, así como de los indígenas de Powhatan, que habitaban aquellas tierras. Pronto, otra tribu indígena

que igualmente vivía en la zona, los Paspegh, atacaron a los colonos, matando a una persona e hiriendo

a otras once. Pero ahí no acabarían las experiencias y vicisitudes de aquellos colonos, ya que en el in-

vierno del año siguiente un incendio acontecido en la bodega en donde se almacenaban los víveres,

al igual que se construía una capilla y un almacén. Un año más tarde, una hambruna acabaría con 200

personas, sobreviviendo tan sólo 60 personas. En 1622 un ataque pertrechado por citados los indígenas

Powhatan, acabaría con un saldo de 400 personas fallecidas en la batalla.

89 Jacobo Carlos Estuardo, nacido en Edimburgo el 19 de junio de 1566 – Theobalds House, 27

de marzo de 1625) fue rey de Escocia como Jacobo VI desde el 24 de julio de 1567 hasta su muerte, y rey

de Inglaterra e Irlanda como Jacobo I desde el 24 de marzo de 1603 hasta su muerte.

64 Ignacio Ruiz Rodríguez

que había sido bautizado como el Mayflower, estableciéndose en Plymouth, en

162090. Tras aquel lugar, una colonia puritana mucho más grande vino a estable-

cerse en el área de Boston, en 1630. Cuando llegaba el año 1635 algunos coloni-

zadores ya estaban emigrando a la cercana zona de Connecticut.

Con el paso del tiempo, las colonias británicas de América del Norte fue-

ron ocupadas y/o erigidas también por muchos grupos de origen no britá-

nico, tales como alemanes, convertidos en agricultores en Pensilvania, los

suecos que fundaron la localidad de Delaware, además de los primeros es-

clavos africanos, transportados desde tierras de África a Virginia, en 1619.

Igualmente, en el año 1626, colonizadores de origen holandés, compraron

la isla de Manhattan a los jefes indígenas del lugar, erigiendo allí una ciudad

que llamarían Nueva Ámsterdam. Curiosamente, en el año 1664, los ingleses

tomaban el lugar rebautizándolo con el nombre de Nueva York.

Un siglo más tarde, en aquellas tierras norteamericanas ya habían surgido nu-

merosos centros urbanos, los cuales se encontraban en pleno proceso de expan-

sión. De entre ellos, la ciudad de Filadelfia, con 28.000 habitantes, era la localidad

más poblada, tras la cual irían otras como Nueva York, Boston, y Charleston. Todas

aquellas colonias compartían la tradición británica de contar con un gobierno re-

presentativo, en donde el Rey de Inglaterra era el encargado de designar a muchos

de los gobernadores coloniales, por más que todos ellos, ulteriormente, estaban

al menos teóricamente obligados a gobernar conjuntamente con una asamblea

elegida, en donde los entonces derechos de naturaleza política se encontraban

restringidos a los terratenientes varones y, obviamente, blancos.

90 Como consecuencia de una serie de problemas en el navío, éste se vio obligado de retornar

hasta en dos ocasiones a puerto para ser reparado. En un tercer intento, salieron por fin de Plymouth,

el 6 de septiembre de 1620, llegando a tierras americanas el 11 de noviembre de ese mismo año. A bor-

do del barco iban 102 personas, sin contar la tripulación. Fueron los primeros colonos en establecerse

en la costa de Massachusetts, formando la colonia de Plymouth.