Guerra al tabaco: Brasil arremete contra los fabricantes de cigarrillos.

AuthorDownie, Andrew
PositionSalud

EL MINISTRO DE SALUD DE BRASIL, JOSÉ SERRA, SE HA BATIDO con poderosos intereses en los últimos años, entre ellos las multinacionales farmacéuticas. Ahora el aspirante a la presidencia se enfrenta a uno de los mayores intereses de Brasil, la industria tabacalera.

En diciembre, el Congreso aprobó algunas de las medidas contra el hábito de fumar más rigurosas del mundo. Las restricciones son, entre otras, prohibición de pedidos por correo, muestras, patrocinio de eventos deportivos y culturales y publicidad en la Internet, en carteles, periódicos, revistas, televisión y radio.

En 18 meses, el nivel máximo de alquitrán y nicotina debe bajar a 10 miligramos por cigarrillo, y las compañías deben dejar de usar clasificaciones como "bajo en alquitrán", "suave", etc. También deben poner imágenes chocantes en cada paquete. Una muestra a un bebé prematuro y consumido cuya madre fumó durante el embarazo.

"Hay una gran campaña [del Ministerio de Salud] contra las tabacaleras", dice Mair Neto, portavoz de Souza Cruz, la filial brasileña de British American Tobacco Co., que produce el 79% de los cigarrillos del país. "Ocurre en el mundo entero y Brasil sigue la corriente mundial".

El Ministerio de Salud también requiere la inscripción de productos de tabaco en la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria, organismo que supervisa la cantidad de sustancias tóxicas en cada cigarrillo.

Pero algunos funcionarios dicen que la campaña contra el hábito de fumar es una maniobra política. Señalan que la reciente arremetida ha contado con un incremento de US$1.500 millones en el presupuesto del Ministerio de Salud para 2001. Se piensa que el presidente Fernando Henrique Cardoso quiere aumentar las probabilidades de que Serra sea el candidato presidencial de su partido en 2002.

A toda velocidad. "El gobierno trata de hacer las cosas en tiempo récord", dice Maria Claudia Souza, directora ejecutiva de la Asociación Brasileña de la Industria del Tabaco (Abifumo). "En Canadá y en Europa, han tardado años, pero aquí van a toda velocidad. El Ministerio de Salud está encima de nosotros".

Sea cual sea la razón, el grupo opuesto al tabaco, entre ellos la mayoría de los 28 millones de fumadores de Brasil, aprueba las nuevas restricciones. Más de las tres cuartas partes de los fumadores las apoyan, muy poco...

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