El debate de las armas: la decisión norteamericana de suspender el embargo de equipamiento militar de alta tecnologia a Latinoamérica tiene simpatizantes y detractores.

AuthorPastor, Robert
PositionTT: The arms debate: the U.S. decision to suspend the embargo on high-tech military weaponry to Latin America has its supporters and detractors

La decisión norteamericana de suspender el embargo de equipamiento militar de alta tecnología a Latinoamérica tiene simpatizantes y detractores.

¿Es beneficioso para estados unidos y America latina promover o restringir la venta de armamentos avanzados? La pregunta proviene del deseo de Chile de comprar cazas F-16; la respuesta es que las ventas benefician al sector aeroespacial estadounidense y a las fuerzas armadas de Chile, pero no a EU ni a las democracias latinoamericanas.

Los principales retos de América Latina son promover el desarrollo, reducir la pobreza y la inequidad, fortalecer la democracia y mejorar la educación. Los chilenos no se benefician cuando su gobierno destina US$1.000 millones a la compra de aviones de combate, en vez de utilizar ese dinero para afrontar los desafíos. Las fuerzas armadas de Argentina, Brasil y Venezuela presionarán a sus presidentes para que imiten a Chile, y al final habrá más tensión y menos seguridad, y los problemas económicos y sociales de la región se agravarán.

Al final habrá más tensión y menos seguridad, y los problemas económicos y sociales de la región se agravarán.

Según la Biblioteca del Congreso, el anterior embargo norteamericano logró reducir los gastos generales de defensa en la región. Es cierto que la participación de EU en el mercado disminuyó, pero todavía supera en más del doble a cualquier competidor.

"Si no las vendemos, alguien las venderá", se argumenta. Pero la salida de esa situación no es promover las ventas, sino negociar un acuerdo de restricción de armamentos con los presidentes de la región. En el Centro Carter, a fines de abril, 17 jefes y ex jefes de gobierno de las Américas propusieron una moratoria de dos años a la compra y venta de armamentos de alta tecnología mientras comienzan las negociaciones sobre un acuerdo de restricción. Desde entonces, 13 primeros mandatarios del continente, entre ellos los presidentes de México, Colombia y Uruguay, han respaldado la propuesta.

Todavía hay tiempo para detener una carrera armamentista en América Latina. Los líderes de la región --incluidos los presidentes Bill Clinton y Eduardo Frei-- deben anunciar el aplazamiento de cualquier decisión sobre la compra o venta de cazas de combate F-16 hasta que la cuestión se discuta a profundidad en la Cumbre de Chile, que debe celebrarse en marzo de 1997 en la capital chilena.

El gobierno de clinton ha puesto fin a la prohibición de vender armas avanzadas a Latinoamérica. Ahora el...

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