El rey de la vía.

• Author: Colitt, Raymond
• Position: Operaciones en Cuba del fabricante de autobuses Busscar - TT: King of the road. - TA: bus manufacturer Busscar's operations in Cuba - Art

Busscar, un pequeño fabricante de autobuses de propiedad familiar, se sale de sus fronteras.

Durante casi una década, una empresa estatal estaba ociosa, con sus equipos oxidados y sus empleados remendando la obsoleta flota de autobuses de Cuba. Pero el año pasado, la planta de Caisa, al suroeste de La Habana, resucitó y produjo 523 autobuses nuevos de primera clase.

El responsable de este avance es Busscar, una fabricante brasileño de autobuses que creó una empresa conjunta con Cuba en 1999, con una inversión de US$10 millones. Busscar triunfó donde otras cinco empresas extranjeras fracasaron en reanimar la entidad estatal que ahora se llama Transbuss.

Esta audaz aventura en el mercado cubano es el capítulo más reciente en la asombrosa transformación de Busscar de una compañía aletargada en uno de los fabricantes de autobuses más importantes del mundo, con una producción anual de 6.150 vehículos. En 2000, Busscar desplazó a su eterno rival brasileño, Marcopolo, para convertirse en el principal fabricante de autobuses del Brasil. La empresa también pasó de una pérdida neta de US$1,9 millones en 1998 a ganancias por encima de los US$10 millones en 2000.

Aunque Brasil es aún el mayor mercado de Busscar, sus ventas internacionales constituyen casi la mitad de los ingresos de la empresa. Durante los últimos tres años, Busscar estableció oficinas en toda Latinoamérica y adquirió en US$15 millones un fabricante de autobuses de México; sus vehículos ya recorren Buenos Aires, Bogotá, Ciudad de México y Santo Domingo. La empresa comenzará a fabricar este año en Noruega.

Esta expansión internacional ha impulsado las ventas, que crecieron de US$173 millones en 1998 a US$210 millones en 2000, y se espera que crezcan un saludable 25% este año.

La semilla internacional la plantó Harold Nielson, el patriarca que fundó Busscar en Joinville, una ciudad industrial establecida por inmigrantes alemanes en el sur del estado de Santa Catarina. Nielson pereció en un accidente de aviación en 1998.

Nielson plantó la semilla de la expansión al extranjero, pero fue el actual presidente de la empresa, Edson Andrade, quien cuidó del cultivo. "El futuro de la compañía era expandirse en el extranjero o perecer a manos de la competencia", afirma Andrade, de 51 años, que trabajó para empresas multinacionales en Brasil, Argentina y Estados Unidos más de dos décadas antes de ser...