Ojo, Victoria's Secret.

• Author: Goodman, Joshua
• Position: TT: Eye, Victoria's Secret.

Caro Cuore, el fabricante argentino de lencería, sale al extranjero y encuentra el éxito.

La actitud tolerante en argentina hacia el sexo y la moda femenina no tiene mucho en común con el estricto código religioso que rige el vestuario de la mujer en Jeddah, Arabia Saudita. Pero bajo las chadors de las sauditas y las minifaldas de las porteñas, hay algo en común: lencería argentina.

Aunque la ropa interior no suele generar auges de exportación, la experiencia del fabricante argentino Caro Cuore destaca cómo un producto bien dirigido y una dosis saludable de determinación pueden generar mucho en el extranjero.

Y en Argentina, donde la paridad entre el peso y el dólar afecta la capacidad de competencia en materia de exportaciones, no es fácil triunfar en un mercado globalizado. Es por ello que el triunfo de Caro Cuore es realmente impresionante.

Como ha sucedido otras veces en otros tiempos, la incursión de Caro Cuore en el extranjero en 1995 fue casi por accidente. En ese momento, los negocios argentinos todavía sufrían las consecuencias de la crisis del peso mexicano sobre el gasto del consumidor. A pesar del gran reconocimiento de la marca en Argentina, la compañía, fundada hace 20 años, estaba en una difícil situación financiera. "Para sobrevivir, decidimos probar suerte abriendo una tienda en Brasil, con varios contactos comerciales que hice cuando viví allí", dice Adolfo Drescher, presidente y fundador de Caro Cuore. "En realidad no sabíamos qué esperar".

Aunque la devaluación del real frenó más tarde la expansión de la firma en Brasil, los primeros pasos de Caro Cuore en ese país se convirtieron en lo que hoy es el secreto mejor guardado de las exportaciones argentinas. Caro Cuore tiene 29 franquicias internacionales en 15 países de Africa, Europa, las Américas y el Medio Oriente. Lo que es más importante: las ventas por concepto de exportación han aumentado más de 10 veces desde 1996, a US$4 millones en 1999, casi el 15% de los ingresos totales. Se trata de una hazaña si se tiene en cuenta que el costo de producción de la ropa interior es más alto que el de los competidores en Argentina y es el 30% más cara.

El potencial de expansión continua es la razón principal por la que el fondo local privado de inversión BISA (del cual la familia Bemberg, propietaria de la cervecería Quilmes, es el accionista principal) adquirió un interés del 60% en la compañía en 1998, por una suma no revelada. "Caro Cuore diseña la clase de productos únicos y...