El magnate de las motos: ?por que retirarse del mercado cuando cada ano hay casi dos millones de clientes nuevos?

AuthorGalanternick, Mery
PositionAbraham Kasinsky, fundador de la empresa Companhia Fabricadora de Pecas - Entrevista

Un anuncio de 30 sentados en la TV brasileña ha renovado la popularidad de un nombre de negocios harto conocido.

Abraham Kasinsky, de 86 años y dueño de Kasinsky Motorcycles, aparece dentro de un "globo de la muerte", una jaula redonda de metal que se usa en exhibiciones de motocicletas en circos. Kasinsky monta el último modelo de la compañía, la GF de 125 ce. Lo acompaña una rubia en uniforme de piloto. Después de darle la vuelta al globo, Kasinsky frena. Entonces aparece en primer plano la rubia vestida con el traje de Kasinsky, mientras él aparece con el uniforme de piloto de la mujer y la cara llena de marcas de lápiz labial. El narrador dice: "Si el señor Kasinsky disfruta su GF de 125 ce de esa manera, imagínese usted, que es más joven".

La osadía de Kasinsky no reconoce límites: sus metes compiten con los colosos japoneses Honda y Yamaha. En 1953, antes que Brasil tuviera una industria automotriz, Kasinsky aprovechó su experiencia como importador de piezas para autos para producir las piezas a menos costo en Brasil.

Y resultó. La Companhia Fabricadora de Peças do Brasil (Cofap), fundada por Kasinsky y su hermano Boris, llegó a ser en cuatro décadas la mayor compañía de piezas para vehículos del país. En 1998, Cofap declaró ingresos de US$1,000 millones, con 18 plantas en varios países, incluida una en Estados Unidos, 35,000 empleados y concesionarios en 97 países.

"Me arriesgué. No podía copiar las piezas norteamericanas que se vendían aquí. Las mías tenían que ser mejores, mucho mejores. Estuve 10 años recorriendo el país para ganarme la confianza del consumidor", dice Kasinsky, que es hijo de inmigrantes judíos que llegaron a Brasil en 1917. Vendió la compañía en 1994, después de la muerte de su hermano.

El edificio de la oficina no estaba incluido en la venta. Durante los seis meses siguientes, Kasinsky iba a la oficina, dice, y se quedaba allí sin hacer nada, "Recuerdo que leía el mismo periódico cinco veces, las noticias políticas, las de economía, las locales, los obituarios, los clasificados. No sabía qué hacer con tanto tiempo libre, pero sabía que no podía seguir así", relata.

De modo que le compró a Hyosung Motora and Machinery, de Corea, una fábrica de motocicletas en la Zona Franca de Manaus, un parque industrial en la selva del Amazonas, en US$20 millones.

¿Por qué gastó el dinero en motos? Cuestión de aritmética, dice Kasinsky. Cada año, el 1% de los 175 millones de...

To continue reading

Request your trial

VLEX uses login cookies to provide you with a better browsing experience. If you click on 'Accept' or continue browsing this site we consider that you accept our cookie policy. ACCEPT