MENEM Y EL MILENIO.

• Author: Hudson, Peter
• Position: Carlos Menem, presidente Argentino - TT: Menem and the millenium. - TA: Carlos Menem, Argentinean president

El presidente Carlos Menem enderezó la economía en los años 90, pero su sucesor tiene problemas que resolver en el nuevo siglo.

CUANDO CARLOS MENEM OCUPO LA PRESIDENCIA DE Argentina en 1989, la nación llegaba al fin de una década de inflación superior al 100% y una fuerte baja del PIB. Los grandes sectores económicos en manos estatales estaban en crisis. Era casi imposible instalar un nuevo teléfono, la electricidad era costosa y los apagones eran frecuentes. YPF, el coloso petrolero, tuvo el dudoso honor de figurar en el Libro Guinness de Récords en 1983, cuando todavía era propiedad estatal, por la mayor pérdida sufrida por una empresa en un solo año: US$4.600 millones.

Hoy, casi todos esos activos se han vendido, y en casi todos ha mejorado notablemente el rendimiento. Los años de Menem produjeron un crecimiento de casi el 35%, mientras la inflación en los últimos años es menor que en Estados Unidos.

Pero el crecimiento económico ha hecho poco por fomentar la justicia social y, tras un primer término dedicado a estabilizar la economía, Menem no ha cumplido las promesas de mejorar la situación del empleo y el bienestar social. Es un problema --en parte-- de mala suerte. El segundo período comenzó con la devaluación del peso mexicano en 1994, seguida por la crisis de Rusia, el derrumbe económico del Sudeste Asiático y la devaluación en Brasil.

Sin embargo, con crecimiento o sin crecimiento, el abismo entre ricos y pobres ha crecido cada año en el período de Menem. Las estadísticas oficiales muestran que la quinta parte de los núcleos familiares, con un promedio de cinco miembros cada uno, sobrevivió sólo con US$12 diarios.

Domingo Cavallo, el célebre ex ministro de Economía que se ha postulado a la presidencia, dice que Menem malgastó oportunidades y se alejó de los principios originales de su gobierno. "El cambio económico duplicó los recursos para las provincias y el gobierno federal. Estaban presentes todas las oportunidades para desarrollar una formidable política social". En vez de hacer eso, dice Cavallo, Menem "lo subordinó todo a su intento de perpetuarse en el poder".

Más orden, menos Brasil. Se espera que la transición a un nuevo gobierno ocurra sin contratiempos. Pero el ganador tendrá que meter en cintura a un Estado derrochador, tendrá que reparar un desastroso sistema fiscal, diversificar una economía demasiado dependiente de Brasil e imponer orden en una de las clases políticas más corruptas del planeta.

Todo el mundo apuesta a que el candidato de la alianza opositora, Fernando de la Rúa, derrotará cómodamente al peronista Eduardo Duhalde y a Cavallo, que encabeza el partido Acción por la República. Una encuesta divulgada a principios de agosto indicó que De la Rúa le llevaba una ventaja abrumadora a Duhalde: el 47% frente al 31%. Cavallo sólo recibió el 7% de apoyo entre los...