Analisis de los mecanismos de pago electronico II: las transacciones electronicas sobre dinero no electronico.

AuthorGonz
PositionECONOM

Introducción

Al ser posible realizar pagos en Internet utilizando las tarjetas de crédito convencionales, la pregunta que se plantea es la utilidad del dinero electrónico. La respuesta es sencilla; las tarjetas de crédito no resultan rentables para los vendedores si el valor del intercambio no sobrepasa los $5.00. (3) Los costes de transacción implicados en la estructura financiera de una tarjeta de crédito suponen que no pueda ser utilizada de forma directa para pagos muy pequeños. El comerciante debe pagar una tasa por cada transacción realizada que suele situarse entre 1.5% y el 3.5%, dependiendo del riesgo y el coste de la operación. Aunque la media se sitúa en el 2.2%, las empresas de Internet suelen abonar más. De este modo, un comerciante que realice un gran número de pequeñas transacciones descubrirá que su banco incrementa su tipo de descuento con el fin de recuperar sus costes básicos. Por ello, no es extraño que no se acepten tarjetas para importes inferiores a $5.00, $10.00 o incluso $15.00. Otro coste importante es el tiempo que requiere la autorización del pago con tarjeta de crédito. Es frecuente que el periodo de espera sobrepase el minuto. Habitualmente, se desarrollan pocas transacciones de gran cuantía a lo largo del día, por lo que este tiempo no parece excesivo. Sin embargo, los clientes que realizan compras de pequeño importe no desean esperar más de unos segundos. Es fácil imaginar la pérdida que supone tardar un minuto o más en formalizar una operación 10 o 15 veces al día. Así pues, el dinero electrónico suele caracterizarse por un menor coste de las operaciones, lo que le hace apropiado para realizar micropagos. Estas transacciones de baja cuantía son muy importantes para hacer posible el comercio electrónico de bienes de bajo valor, poner en práctica esquemas para pagar por ver páginas web, jugar a través de la red, etc. No obstante, no existe un criterio unánime acerca del concepto "micropago". Mientras algunos lo definen como "pagos inferiores a $10", (4) otros entienden "cantidades muy pequeñas, por ejemplo unos pocos euros, y que en ocasiones pueden ser del orden de 0.01 euros o incluso menores". (5) En cualquier caso, la Comisión de las Comunidades Europeas "subraya la necesidad de que, conjuntamente con la introducción del euro, se establezcan en el mercado interior servicios económicos de pagos de poco valor. La Comisión reconoce que los servicios de pagos de escasa cuantía y las condiciones que los regulan son importantes para garantizar la confianza de los consumidores en el comercio electrónico". (6) En este sentido, hay tres elementos clave para lograr el objetivo de un espacio único para todos los medios electrónicos de pagos; un alto grado de transparencia, un nuevo enfoque de la política de la competencia y una interoperabilidad mejorada.

Los tokens

Los tokens, como ya se comentó, son secuencias de bits que representan un cierto valor y que se obtienen a cambio de una cantidad de dinero real. El banco emisor firma los tokens con su firma digital, se los entrega al usuario que los demanda, y carga en su cuenta la cantidad de dinero real correspondiente al dinero digital generado. Una vez creados y firmados, los tokens pueden almacenarse, transferirse a través de la red a cambio de un producto o servicio, o volverse a convertir en dinero real. Los tokens son, por tanto, el equivalente digital de los bi lletes y monedas, por lo que el pago es rápido, sin autorización previa y anónimo. No obstante, no debe olvidarse la posibilidad de que si se pierde el dinero electrónico o es robado, no se puede impedir que otra persona lo gaste. Del mismo modo, debe evitarse la falsificación o duplicación de tokens.

A continuación se describen algunos de los sistemas de dinero electrónico más conocidos.

Ecash

Desarrollado por la empresa holandesa DigiCash en 1994, se trata de un sistema de pago certificado que constituye una parte importante de las transacciones realizadas actualmente con dinero electrónico a través de internet. Utilizando el software de DigiCash, el cliente crea tokens en blanco y los envía a través de un sobre digital oculto al banco para su certificación. El banco firma cada token, carga en la cuenta del cliente la cantidad de eCash emitido y devuelve los tokens a través de internet. El banco no ve los tokens reales hasta que son presentados por el portador. Este procedimiento recibe el nombre de "firma ciega" puesto que no es posible ligar el dinero con el consumidor. Opera como el dinero en efectivo, donde los billetes nunca identifican a la persona que los utilizan. Los clientes de eCash pagan enviando moneda eCash al comerciante, que puede fácilmente verificar si el dinero es válido (a través de una simple solicitud online en cualquier momento). No existen pins ni números de tarjeta que puedan ser utilizados posteriormente de manera fraudulenta. Desde el punto de vista de los bancos ofrece algunas ventajas: su simplicidad, la posibilidad de ofrecer a los clientes un valor añadido que pueden usar en cualquier lugar y momento, el fortalecimiento de las...

To continue reading

Request your trial

VLEX uses login cookies to provide you with a better browsing experience. If you click on 'Accept' or continue browsing this site we consider that you accept our cookie policy. ACCEPT