El Laboratorio verde.

• Author: A. Dempsey, Mary
• Position: Veh

El Hato Doña Bárbara abre los llanos al ecologismo.

El ultimo plan ecológico de Francisco Estrada Suena disparatado: 20 vehículos todoterreno recorriendo una enorme llanura cuya fauna está en peligro. Hasta el nombre del evento, 4x4 EcoAventura, parece contradictorio. Pero el ranchero y ambientalista venezolano asegura que hay una meta ecológica.

La actividad de cinco días, fijada para fines de abril, es el último de varios proyectos ambientales en el rancho de Estrada en los llanos, zona ganadera donde las familias comentan los últimos secuestros durante en la cena y muchas disputas se resuelven a tiros.

El Hato Doña Bárbara, de 36.000 hectáreas, pertenece a la familia de Estrada desde hace cinco generaciones. Desde 1989, cuando se hizo cargo de las operaciones diarias del rancho, al que llama "un maravilloso laboratorio verde", Estrada trata de salvar la fauna y la vegetación. Promete que la carrera de vehículos 4x4, amenizada con conferencias sobre la naturaleza y recorridos ecológicos, encaja con esa meta.

"Cuando mi abuelo estaba aquí, había más animales", explica Estrada, de 35 años. Culpa a la urbanización, a las débiles leyes ecológicas y a la quema, que es la mayor amenaza para animales lentos, como osos hormigueros, tortugas y capibaras, los mayores roedores del planeta. Los capibaras pasan tanto tiempo en los ríos que la Iglesia Católica los declaró en una ocasión peces, y por lo tanto aptos para comer en Viernes Santo. Los cazaron hasta el borde de la extinción.

El rancho de Estrada se llama Doña Bárbara, un clásico de la literatura latinoamericana. Y no es pura coincidencia. En 1927, el abuelo de Estrada, que era poeta, le contó al escritor Rómulo Gallegos, futuro presidente de Venezuela, la historia de Pancha Vásquez, una vecina que según los llaneros hacia maleficios a sus enemigos, seducía a los hombres para que robaran las tierras de sus rivales y desollaba vacas viras. Cuando Gallegos escribió Doña Bárbara se inspiró en Pancha Vásquez.

El rancho de Estrada, cuyo nombre oficial es Hato La Trinidad de Arauca, recibió el nombre de Doña Bárbara después que Vásquez, aquejada de una fiebre, falleció en el hato mientras esperaba una embarcación que la llevaría por el río Arauca hasta la consulta de un médico. Los rancheros no permitieron que la enterraran en el cementerio de la comarca, de modo que el abuelo de Estrada la sepultó en sus tierras y marcó la tumba con un árbol divi-divi.

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