Hazana en Argentina: salvar companias arruinadas es el nuevo juego de los inversionistas.

• Author: Goodman, Joshua
• Position: Finanzas

La debacle de la economía argentina ha generado una de las mayores crisis de deuda privada jamás vista.

Hay una reñida competencia por enormes comisiones, que llegan al 1% de la reestructuraciones. Bancos de inversión de Estados Unidos como J.P. Morgan Chase y Morgan Stanley han conseguido media docena de contratos, como los de Telecom, con una deuda de US$3,300 millones; del distribuidor de electricidad Transener y del fabricante de cemento Loma Negra, que confía en la ayuda de Daniel Marx, ex secretario de finanzas de Argentina, para renegociar su deuda de US$430 millones.

Empresas como el gigante energético Pérez Companc, que debe renegociar una deuda de US$2,300 millones para su adquisición por parte de la brasileña Petrobras, deben salir mejor paradas. El peso argentino ha perdido un 75% de valor desde enero, lo que abarata los bienes argentinos en el extranjero y favorece a lo exportadores con suficiente efectivo para financiar transacciones.

"Cada día que pasa con una tasa cambiaria tan exagerada es una oportunidad fenomenal para ellos", dice Ubaldo Aguirre, socio de Aguirre y González, firma de inversión de Buenos Aires que maneja ocho reestructuraciones.

Incluso las empresas energéticas y de servicios públicos extranjeras generalmente con suficiente liquidez o que podrían beneficiarse de una devaluación, se ahogan bajo una deuda de US$50,000 millones con obligacionistas de diversos países. Sesenta y cinco compañías argentinas han incumplido los pagos de la deuda desde principios de año. En ese país ocurrieron casi el 40% de los incumplimientos empresariales de todo el mundo en el primer trimestre del año, según Standard & Poor's.

Las empresas de servicios públicos emitieron alrededor de una tercera parte de la deuda empresarial argentina. Antes eran los deudores más seguros del país, pero en enero sus tarifas se convirtieron a pesos y se congelaron.

Esas empresas, en su mayoría de propiedad extranjera, ahora dicen que no pueden cubrir los costos operativos. El gobierno tal vez tenga que intervenir las mismas empresas que privatizó hace sólo una década.

Aunque se habla de un alza de las tarifas, no hay garantías de que los consumidores puedan pagar. "El tiempo conspira contra un...