De la estabilidad a la movilidad económica en Brasil.

• Author: Galanternick, Mery

[ILUSTRACIÓN OMITIR]

RIO DE JANEIRO -- Hay pocos altos ejecutivos en Brasil tan afortunados como el fabricante de computadoras Helio Rotenberg, cuya compañía ha ido creciendo hasta convertirse en líder en ventas gracias, en parte, a la lluvia de millones que salen de los bolsillos de la nueva clase media.

Este trascendental cambio demográfico es considerado el pilar central de la transformación económica y política de los últimos 16 años en Brasil, durante los cuales el país ha pasado de ser una nación pobre y subdesarrollada a convertirse en una de las principales economías emergentes, junto con China, India y Rusia.

"La revolución más importante que ha vivido Brasil en los últimos años ha sido rescatar de la pobreza a 35 millones de personas para convertirlos en clase media, expandiendo ampliamente el mercado de consumidores", afirmó Rotenberg, director ejecutivo de Positivo Informática, cuya marca local supera en ventas a competidores internacionales líderes.

Al presidente saliente Luiz Inácio Lula da Silva se le reconoce el mérito de haber implantado una serie de políticas que fomentaron mejoras sociales, mitigando las desigualdades y elevando el nivel de vida, un logro que algunos comparan ya con el del presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt y su New Deal(Nuevo Trato). Desde que Lula asumió la presidencia el 1 de enero de 2003 el país redujo espectacularmente su tasa de desempleo, desde un récord histórico de 13 por ciento ese año a 6.7 por ciento en septiembre. En lo que va de 2010 la economía ha generado dos millones de empleos, en comparación con 600,000 en 2003.

La existencia de una clase media más numerosa se hace evidente en la industria de Rotenberg: en 2003 Brasil era el sexto consumidor de computadoras del mundo y ahora es el tercero, después de Estados Unidos y China. Positivo Informático, cuya sede está Curitiba, es la marca líder de computadoras en el mercado local y un proveedor importante de tecnología informática, en buena medida gradas a las altas tarifas que Brasil aplica aún hoy a las importaciones de tecnología. "Somos uno de los pocos casos en el mundo en los que una empresa local se sitúa por encima de marcas multinacionales", apuntó Rotenberg.

Entre otras industrias, los minoristas, las empresas manufactureras y los constructores se han beneficiado del crecimiento del poder adquisitivo de los brasileños (pase a la página 54 para ver la entrevista con el presidente de la constructora Gafisa, Wilson...