Carga pesada.

• Author: Coia, Anthony
• Position: Puertos en Argentina y Brasil tratan de recuperarse - TT: Heavy load. - TA: Brazilian and Argentinean ports try to get back in business

Santos y Buenos Aires tratan de recuperar el tráfico de contenedores.

Desde 1997, el comercio en el mercado común del sur (Mercosur) está a la baja. Y en ningún lugar ha sido peor que en Santos (Brasil) y Buenos Aires, dos de los principales puertos del continente.

Santos, rey tradicional de los contenedores, perdió su corona en 1998 a manos de Buenos Aires, que cedió la supremacía a Colón, en Panamá, en 2000. Colón movió unos 1,35 millones de contenedores en 2000, frente a 1 millón en Buenos Aires y 800.000 en Santos, según estadísticas de la Comisión Económica de Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL). "Hemos visto un aumento de la carga, sobre todo de Asia", dice Mercedes Morris, portavoz del Canal de Panamá.

Desde luego, la dinámica de Colón es distinta a la de Buenos Aires y Santos. Panamá es una escala para cargamentos que van a otra parte.

Lo que en realidad preocupa a los puertos sudamericanos es que han estado perdiendo carga, a un ritmo de entre el 3% y el 5% anual, lo que no sienta bien a las navieras, las compañías ferroviarias y otras empresas de transporte que han invertido en nuevas grúas, redes de ferrocarril y enlaces logísticos.

Pero los puertos sólo pueden achacar una parte de la baja a los problemas en el comercio. Por ejemplo, a los puertos del norte de Brasil les ha ido muy bien desde 1998. Las cifras de carga en el puerto de Salvador han aumentado el 54%. Las de Natal se han disparado un 354%. "Creemos que hay potencial en el norte", dice Demir Lourenco, a cargo de las operaciones en Salvador de Wilson, Sons, un operador internacional portuario. Y hasta varios puertos del sur han mejorado: en Sao Francisco do Sul, el volumen de contenedores creció un tercio.

El puerto de Buenos Aires, sin duda, sufre por el malestar económico del país. Recientes disputas laborales, huelgas de camioneros y otras protestas han agravado los problemas del puerto y de la nación.

La apuesta argentina. Pero tarde o temprano, las cosas mejorarán en Argentina, y muchos en el sector del transporte piensan que ese optimismo que permitió que el puerto desbancara a Santos en el pasado será una buena inversión ahora.

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