Cambio de suerte en América Latina.

AuthorPrice, John
PositionLa econom

Durante los últimos diez años, la fortuna le ha sonreído a los exportadores de recursos naturales. Los países & América Central, el Caribe y México, vinculados tradicionalmente a la economía & Estados Unidos, se han retorcido de envidia al ver cómo la inversión de dólares se fue hada América del Sur, cuyo motor económico es China. Pero, el acomodamiento de los precios de las materias primas, una economía estadounidense que se recupera y una renovada sed de reforma en México prometen sacar a la nación azteca y algunos de sus vecinos de una década de crecimiento lento.

[GRÁFICO OMITIR]

Hace diez años se invirtieron miles de millones de dólares en exploración en minería y energía. Esos esfuerzos están dando sus frutos. Nuevos récords de extracción minera están apareciendo en Australia, Canadá, Chile, Perú, China y otros lugares, mientras que la producción de crudo y gas de América del Norte se ha disparado.

La crisis financiera obligó al cambio tanto en las economías de China como de Estados Unidos. China pasó de ser una economía impulsada por la inversión en infraestructura a una centrada en el mayor consumo interno. La economía de Estados Unidos pasó de ser importadora a exportadora de energía y bienes manufacturados. El cambio drástico en ambos países ha servido para disminuir la demanda de materias primas (en China) y elevar la oferta (en Estados Unidos). Como resultado, los precios de las materias primas se están suavizando.

En tanto, una década de condiciones globales benignas debilitó la voluntad de reforma en la mayoría de los países de América del Sur. El crecimiento récord, junto con el aumento de la corrupción y la intransigencia política, ha creado una clase media ilustrada en muchos países de Sudamérica que ya se ha hecho sentir con disturbios en Chile y Brasil.

América del Sur se ha movido hacia la izquierda en su política económica, marcada por mayores rentas para los mineros y las empresas de energía, leyes ambientales y laborales más onerosas y más impuestos y cuotas para usuarios. Los altos precios de los recursos han mantenido vivos gobiernos incompetentes en Venezuela, Argentina, Bolivia y Ecuador. En Chile, Colombia y Perú, consideradas las estrellas económicas del subcontinente, grupos de negocios locales se sienten frustrados por el populismo que se infiltra cada vez más, y por la burocracia.

Mientras que los sectores de recursos naturales de Sudamérica han florecido, las industrias intensivas en trabajo están...

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