Apostando en el crecimiento de empresas emergentes: inversionistas en capitales de riesgo.

• Author: Rapoza, Kenneth

SÃO PAULO -- El ingeniero brasileño Carlos Eduardo Guillaume ya era un veterano de la informática, pero cuando se dispuso a conseguir fondos para invertir en empresas emergentes brasileñas, se sintió como un pionero de las inversiones de capital privado brasileñas.

Hace cinco años, Gnillaume fundó su firma de fondos de capital de riesgo, Confrapar, en el estado de Minas Gerais. En aquel momento habían pocas firmas, o ninguna, que proporcionaban el capital inicial--o "semilla" en íngles--para empresas de informática que operaran a pura inspiración e ingenio y no con ingresos reales. La visión de Confrapar era asociarse con el gobierno para financiar estas empresas emergentes con el capital inicial necesario para prescindir de familiares o amistades para conseguir el dinero para empezar un negocio.

"Fuimos el primer fondo de capital inicial en la historia de Brasil", dice Guillaume. "Fue una experiencia de aprendizaje".

Ese también fue el caso del gobierno de Brasil, que por primera vez estaba experimentando con fondos de capital de riesgo, desarrollando criterios y parámetros de diligencia debida que Confrapar y otros que vinieron después necesitarían seguir para conseguir fondos equivalentes del gobierno.

Los fondos de capital inicial, como con los que Confrapar opera regionalmente, están surgiendo por todo Brasil, uniéndose a los fondos de crecimiento de capital privado que desde hace mucho tiempo han sido un elemento principal de los capitalistas de riesgo del país.

Guillaume y sus socios reunieron $6.1 millones para invertir en los primeros seis meses. Desde entonces, con la ayuda del gobierno de Brasil, la firma casi ha duplicado esa cantidad, dice Guillaume, de 36 años de edad, que se inició en 2007 como un inversionista en el sitio web de contactos profesionales Viale, que se desarrolló siguiendo el modelo del popular sitio web de contactos Linkedin.com. Guillaume y sus socios, que ya cuentan con la promesa de "muchos compromisos de inversionistas privados", están saliendo a la calle a conseguir $14 millones más para el fondo NaseenTI de Confrapar, que invertirá en tecnologías de telecomunicaciones y medios digitales en el estado de Belo Horizonte y $22 millones para el fondo BandeiranTI en el estado de Silo Paulo.

Parte del desafio es convencer a otros inversionistas de que estas empresas emergentes tienen el potencial, y que eventualmente generarán ventas. "Sabíamos que iba a ser dificil convencer a los inversionistas privados y a...