Alimento de los dioses.

• Author: Labanca, Alejandra

Originalmente venerado como el alimento de los dioses, hoy el chocolate se prueba, analiza y saborea con la rigurosidad y apreciación que antes estaba reservada para el vino. A medida que se engrosan las filas de los conocedores del chocolate, también se expande el mercado de productos gourmet, desde bombones hechos a mano hasta chocolates en barra con ingredientes de origen único y premier cru, hecho con granos de cacao de una única hacienda.

Esta intensa atención marca una gran evolución para el cacao. Los granos del pequeño árbol se cosecharon por primera vez hace alrededor de tres mil años en Centro y Sudamérica. Los aztecas tostaban y molían los granos para preparar "xocoatl", una bebida picante energizante que supuestamente tenía propiedades afrodisíacas. Su introducción en Europa a cargo de los poderes coloniales despertó un romance duradero que se intensificó en el siglo XIX, con el desarrollo de los procesos para crear barras y golosinas.

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Con su larga tradición, técnicas avanzadas y normas de calidad, los europeos han mantenido su reputación de ser quienes producen el mejor chocolate del mundo. Si un producto tiene más de 5 por ciento de grasa que no provenga de manteca de cacao, no puede denominarse chocolate. Los belgas son los más exigentes: sólo permiten manteca de cacao. Como resultado, la mayoría de los chocolateros del mundo compran bloques de chocolate de productores comerciales europeos, señaló Alejandra Bigai, propietaria de Románicos Chocolate en Miami cuyas confecciones se preparan exclusivamente con cacao venezolano.

Del puñado de países de todo el mundo que producen granos de cacao, Venezuela y Ecuador son los mayores productores de Latinoamérica. "Crecí con el mejor chocolate del mundo, el chocolate venezolano que mi abuela usaba para preparar trufas", dijo Bigai, nacida en Venezuela. "Es frutado y delicioso".

En su pequeña tienda, Bigai elabora sus chocolates delicadamente decorados. Sus trufas exclusivas, con nombres como Original Sin (pecado original) y Heavenly Vanilla (vainilla celestial), se venden desde $18 por una caja de seis (1801 Coral Way, Miami; ; 1-305-854-9936 o 1-877-848-4897; en línea en www.romanicoschocolate.com).

Cuando Bigai lo puede conseguir, compra cacao hecho con granos de Chuao, un pueblito sobre la costa del Caribe venezolano donde las mujeres tradicionalmente han cultivado y cosechado los granos del cacao. "Estas mujeres saben cómo procesar estos granos", señaló.

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